Una mujer asesinó a 40 pandilleros de una peligrosa banda criminal en Haití luego de darles pastelitos hechos con aceite de oruga, un plaguicida comúnmente empleado en faenas agrícolas.
La masacre ocurrió en la comuna de Kenscoff, en el distrito de Puerto Príncipe. De acuerdo con la información divulgada por CNN, la mujer cocinó los pastelitos y se los entregó al grupo criminal como un supuesto gesto de buena voluntad.
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Medios locales detallaron que los fallecidos pertenecerían a la organización delictiva Viv Ansanm, una coalición de pandillas que la semana pasada fue catalogada por Estados Unidos como una agrupación terrorista.
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Luego de consumir los pastelitos, los 40 presuntos pandilleros empezaron a sufrir de fuertes dolores estomacales, así como de convulsiones. Antes de que pudieran reaccionar, todos empezaron a morir antes de siquiera recibir atención médica.
Al percatarse de lo que les habían hecho, otros miembros de la banda se dirigieron a la casa de la mujer que cocinó los pastelitos para atentar contra su vida. Sin embargo, no la encontraron allí, por lo que procedieron a destrozar el lugar.
La mujer suponiendo lo que iba a ocurrir huyó de su casa y por miedo a represalias se entregó a una comisaría local donde la privaron de libertad. En su declaración afirmó que actuó por cuenta propia y buscó protección por temor.
