El gobierno de Trinidad y Tobago envió a 200 migrantes venezolanos a un centro de detención de inmigración para ser deportados por órdenes de la primera ministra del país, Kamla Persad-Bissessar.
La noticia la dio a conocer el Ministerio de Seguridad Nacional de Trinidad y Tobago. Persad-Bissessar, había adelantado su intención de realizar deportaciones como parte de su política migratoria.
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Este lunes el secretario permanente del Ministerio de Seguridad Nacional, Videsh Maharaj, envió la solicitud, en la que explicó que los migrantes ilegales serían «amontonados» antes de que se lleve a cabo la deportación.
Maharaj precisó que se realizará una deportación en «masa». Desde hace meses la primera ministra había recibido críticas por no estar cumpliendo con su política migratoria. En agosto la cuestionaron al respecto, a lo que respondió que «pronto».
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Asimismo, culpó a la anterior administración por la política migratoria que permitían en el país. También aseguró que esta situación está vinculada con la criminalidad en el país.
«Eso fue lo que permitieron que pasara por los pasados diez años. No hubo ningún intento para que nuestros antecesores separaran a aquellos inmigrantes venezolanos que legítimamente escapaban de su país a aquellos que venían acá con intenciones criminales», sostuvo Persad-Bissessar en aquel momento.
