Dayana Graterol, la esposa del migrante venezolano que murió cruzando el río Bravo el pasado 21 de diciembre, se pronunció por primera vez y relató lo que vivió con sus hijos en la frontera sur de Estados Unidos.
Pocos días después de la tragedia, Dayana rompió silencio y aseguró que el plan original era cruzar legalmente hacia Estados Unidos.
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Precisó que salieron de Venezuela el 20 de noviembre: «Empezamos la travesía, cruzamos el Darién, pasamos Panamá, Costa Rica y todos esos países y llegamos a México».
Un migrante venezolano de nombre Carlos y otro haitiano murieron ahogados cuando intentaban cruzar el Río Bravo, de Matamoros, Tamaulipas, a Brownsville, Texas. 😟🥺😢 pic.twitter.com/1yrrvWO0pA
— CrónicaPolicial (@CronicaPolicial) December 23, 2023
Luego de llegar descargaron la aplicación CBP One con la intención de pedir el asilo una vez estuvieran frente a las autoridades de EEUU. Sin embargo, se les acabó el dinero y, ante la falta de respuesta sobre la gestión en la app, decidieron cruzar ilegalmente el río el pasado 21 de diciembre.
«MI HIJO EXTRAÑA A SU PAPÁ»
Fue precisamente esa decisión la que marcaría la tragedia y los llevaría a cientos de titulares. El video de la muerte de Carlos en medio de la desesperación le dio la vuelta al mundo.
En las imágenes se aprecia que Carlos se ahogó en el río, ante la mirada de su esposa y sus hijos de apenas cuatro y 10 años. El resto de su familia consiguió llegar a Estados Unidos, pero ahora están traumatizados.
«Mi niño me dice que necesita a su papi. Necesita un abrazo de él», dijo Dayana. «Esto es algo inexplicable. De verdad que no nos imaginamos jamás esto que nos pasaría», aseveró la mujer, quien está en Utah.
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Dayana se unió a la lista de miles de migrantes venezolanos que consiguieron cruzar irregularmente hacia Estados Unidos. Ahora esperan que alguna medida migratoria les permita quedarse en suelo estadounidense.
A la fecha las autoridades no han hallado los cuerpos del migrante Carlos León ni del haitiano que también luchaba para mantenerse a flote.
