La comunidad de Cranford, en Nueva Jersey (EEUU), se encuentra sumida en el dolor tras la muerte de María Niotis e Isabella Salas, dos adolescentes de 17 años, quienes fueron atropelladas —por otro adolescente— mientras circulaban en bicicletas eléctricas por una zona residencial.
De acuerdo con lo reseñado por New York Post, el incidente ocurrió este lunes por la tarde, cuando un Jeep Compass negro de 2021 conducido por el adolescente embistió a las dos menores en la avenida Burnside, una calle tranquila de Cranford con límite de velocidad de 25 mph. Ambas menores murieron más tarde en el hospital.
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El conductor huyó del lugar, pero fue detenido poco después. La fiscalía del condado Union acusó al sospechoso, un menor de 17 años, de dos cargos de asesinato en primer grado.
Según testimonios de familiares y vecinos de las menores, el acusado había estado acosando a una de las víctimas durante meses. De hecho, afirmaron que se reportó su comportamiento a la escuela y policía, y existía una orden de alejamiento en vigor.
Sin embargo, las denuncias «no fueron atendidas con la urgencia necesaria». “Ella presentó denuncias y no se hizo nada”, declaró Tammy Carbajal, amiga de una de las adolescentes.
Se detalló, que el joven incluso estacionaba su vehículo frente a la casa de una de las víctimas durante semanas antes del fatal atropello. “Solo espero que este chico o quien sea reciba la pena máxima”, dijo un residente.
INVESTIGACIÓN EN CURSO
La fiscalía del condado de Union solicitó a los vecinos que viven cerca que revisen sus cámaras de vigilancia. Buscan específicamente videos de un Jeep Compass negro de 2021 con vidrios polarizados, antes, durante y después del accidente.
Si bien no se reveló de momento el nombre del sospechoso debido a su edad, el jefe de policía de Westfield, Christopher Battiloro, emitió una declaración sobre el acusado.
POLÉMICA POLICIAL EN CRANFORD Y COMUNICADO
«Como muchos de ustedes, estoy conmocionado. Aturdido y profundamente angustiado por la terrible pérdida de dos jóvenes, ocurrida en el municipio de Cranford el lunes por la noche. Mis agentes de policía y yo no solo respondimos con urgencia a este incidente para ayudar a nuestros compañeros de las fuerzas del orden en Cranford, sino que resido en el mismo barrio donde ocurrió —escribió Battiloro—. Si bien en redes sociales se ha hecho público que el acusado es pariente mío, no es mi hijo ni miembro de mi familia inmediata. Quiero ser claro, con la mayor firmeza y firmeza posible, que de ninguna manera mi esposa, mis hijos ni yo condonamos, defendemos ni excusamos las acciones que causaron esta terrible y trágica pérdida de vidas», reza parte del mensaje del funcionario citado por CBS News.
«Como resultado de este trágico incidente, perdí a una vecina, una joven hermosa y carismática llamada Isabella Salas, a quien he visto crecer desde el día que me mudé a Cranford —añadió—. Mi vecindario se siente ultrajado y estamos de luto. Les escribo para decirles que estoy con ustedes —mis amigos y vecinos de Cranford— y que llevo el duelo con ustedes. Mi esposa, mis hijos y yo estamos profundamente desconsolados por esta pérdida sin sentido, pero también por la pérdida de la sensación de seguridad en el vecindario y la comunidad que ustedes y yo llamamos hogar», concluyó.
