Sandro Dias, un skater brasileño, batió dos récords mundiales tras lanzarse desde la «mayor rampa del mundo», una proeza que por años soñó con conquistar y que ahora ha conseguido al imponer la marca del drop-in en una patineta más alto en la historia, con 75 metros, y establecer la velocidad más rápida jamás registrada en esta disciplina, pues alcanzó los 130 kilómetros por hora.
Dias bajó desde la cima del Centro Administrativo Fernando Ferrari (CAFF), un edificio de 22 pisos y casi 89 metros de altura situado en Porto Alegre. Tras llegar al final, una pared especial acolchada amortiguó su impacto.
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El skater carioca, de 50 años, se preparó de manera meticulosa tanto en forma física como técnica, alistamiento al que dio inicio en enero. Para ello, el atleta organizó un programa de entrenamiento, el cual incluyó el uso de un chaleco de 40 kilogramos de peso, con el fin de adaptarse a la tensión de las fuerzas G.
Dias también llevó a cabo pruebas de velocidad en la pista de un aeropuerto. Allí, habituó a circular a más de 136 km/h sobre su patineta. La planificación además contempló la monitorización de la velocidad del viento y la adaptación de su equilibrio a las exigencias extremas del reto.
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El patinador Sandro Dias batió récords mundiales de altura y velocidad en monopatín al descender de una rampa de 90 m en Porto Alegre. Alcanzó 103,8 km/h, soportó 3,9 g y necesitó una pared especial para frenar. – @el_pais pic.twitter.com/yw9zQP7riH
— Reporte Ya (@ReporteYa) September 27, 2025
LAS PALABRAS DE SANDRO DÍAS TRAS SU HISTÓRICA GESTA
La impresionante gesta de Sandro Días significa no solo un logro personal, sino también un importante avance para el skate como deporte, reseñó Infobae.
«Me siento muy feliz. Recibí la energía de toda la gente que llegó y eso me dio más motivación de seguir. No tengo palabras para describir exactamente cómo me siento, pero estoy con mucha energía. Era un desafío que parecía imposible, pero no me detuve porque sabía que estaba haciendo algo grande no solo por mí, sino por el skate mundial», manifestó Sandro Dias, perteneciente a Red Bull.
La estructura por la que descendió tiene el título de «la mayor rampa del mundo», nombrada así los habitantes de Porto Alegre. Asimismo, se convirtió en un símbolo para la comunidad local y en un escenario soñado para una hazaña de esta magnitud.