La relación entre el presidente de EEUU, Donald Trump, y el CEO de Tesla, Elon Musk, que alguna vez pareció una alianza estratégica entre poder político y tecnológico, sigue en un punto crítico luego del «toma y dame» protagonizado en redes sociales.
En una entrevista telefónica con ABC News, el presidente calificó este viernes al magnate sudafricano como alguien que “perdió la cabeza” y aseguró que no tiene interés en hablar con él por el momento.
LEA TAMBIÉN: «ES HORA DE LANZAR LA GRAN BOMBA»: ELON MUSK LANZA SERIA ACUSACIÓN CONTRA TRUMP Y SU RELACIÓN CON EPSTEIN
Esta declaración se produce tras un intercambio hostil en redes sociales, donde ambos se lanzaron acusaciones que han sacudido tanto el ámbito político como el empresarial.
El detonante de esta ruptura fue la dura crítica de Musk al nuevo plan fiscal y presupuestario impulsado por Trump, al que calificó de “abominación repugnante” por su impacto en la deuda pública y los recortes a sectores clave como la energía renovable.
Musk, quien recientemente abandonó su cargo en el Departamento de Eficiencia Gubernamental, acusó además a Trump de estar vinculado a los archivos del caso Jeffrey Epstein, lo que elevó el conflicto a un nivel explosivo.
Trump, por su parte, respondió con amenazas de cancelar contratos gubernamentales con empresas de Musk como SpaceX y Tesla, y sugirió incluso vender el Tesla rojo que había comprado como gesto de apoyo meses atrás.
Aunque personas cercanas al mandatario aseguran que está más decepcionado que enojado, su tono en la entrevista fue tajante: “No me interesa hablar con él”.
En medio de esta tormenta, Musk ha mostrado señales contradictorias. Aunque inicialmente intensificó sus ataques, luego respondió con un “buen consejo” a un usuario que le sugirió calmarse, insinuando que no retirará la nave Dragon de servicio. Esta sirve para transportar astronautas y suministros a la Estación Espacial Internacional.