Una joven influencer de 21 años fue asesinada por un compañero de la universidad, en la ciudad argentina de Córdoba, supuestamente por no corresponder a las pretensiones sentimentales del agresor.
La víctima, llamada Catalina Gutiérrez mantenía una relación de amistad con su asesino, Néstor Aguilar Soto, con quien cursaba la carrera de Arquitectura en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).
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Soto, oriundo de Bariloche (provincia de Río Negro), llegó a Córdoba tres años atrás con la intención de asistir a la mencionada casa de estudios donde conoció a la hoy occisa.
«ERA EL AMOR DE MI VIDA»
El joven habría confesado el crimen luego de acercarse a la comisaria a declarar, en calidad de amigo de la víctima.
No obstante, las inconsistencias en sus declaraciones llenaron de suspicacia a los detectives, quienes a la postre lo harían confesar el asesinato.
«Era el amor de mi vida», reveló finalmente Soto a la policía durante su interrogatorio, según lo reseñado por Actualidad Viral.
PADRE DE LA VÍCTIMA LO DESCRIBIÓ COMO «MACABRO»
Por su parte, el padre de la influencer, quien es el reconocido arquitecto cordobés Marcelo Gutiérrez tildó al asesino de su hija como alguien «macabro», al revelar que Soto se acercó a ellos para solidarizarse horas después de haber perpetrado el crimen.
“Es alguien desquiciado que no merece vivir en este mundo”, sentenció el arquitecto al reconocer que nunca sospechó de que este pudiera ser capaz de un acto así.
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“Sé que era una persona allegada a ella, es más, hasta ha venido a mi casa mil veces a estar con ella, lo ha invitado mi hija, venía a cenar, han compartido momentos en la facultad como amigos”, describió Gutiérrez.
“Tengo un dolor, se me parte el alma y no lo entiendo”, agregó el cordobés durante la primera entrevista que brindó al noticiero de El Doce TV.
LO QUE SE SABE
Luego de que los padres de la influencer notaran que había dejado de responder mensajes y llamadas, estos se dirigieron hacia la comisaría ubicada en el barrio Inaudi para denunciar su desaparición el miércoles 17 de julio.
Para ese entonces, se suponía que debía estar en el Patio Olmos donde la esperaba su novio y amigos, pero la joven nunca llegó.
Ante esta situación amigas de la víctima rastrearon su celular para lograr su ubicación en la calle Pedro Echagüe 3900, en el barrio Ampliación Kennedy. Al encontrar, pasada la media noche del jueves, el vehículo donde se trasladaba la joven, un Renault Clio, su cuerpo fue hallado sin vida con signos de asfixia por estrangulamiento y múltiples lesiones, aunque las investigaciones descartaron el abuso sexual.
En cuanto al avance de la investigación, fuentes judiciales consultadas por Infobae confirmaron que el fiscal de Instrucción Capital, Distrito 3, José Alberto Mana, recién lo indagará la próxima semana.
Mientras que el fin de semana se concentrarán en la realización de más peritajes en la escena del crimen, en recopilar testimonios y analizar los celulares de los involucrados.
Por último, aseguraron que el investigador se reunirá con la familia de la víctima el lunes próximo.
