Hugo “El Pollo” Carvajal, exjefe de inteligencia militar del chavismo, envió una carta desde prisión al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en la que reveló cómo «desde Venezuela» se habría utilizado el narcotráfico como «un arma contra Estados Unidos», describiendo una estrategia de “guerra irregular” basada en la cocaína.
En el documento filtrado por The Dallas Express, Carvajal aseguró que durante dos décadas el chavismo convirtió el narcotráfico en un instrumento político y militar, con el objetivo de debilitar a la sociedad norteamericana.
LEA TAMBIÉN: «NO VA A ENGAÑAR A TRUMP«: RUBIO ACUSÓ A MADURO DE HABER «ROTO» TODOS LOS ACUERDOS CON EEUU
Según sus palabras, la droga fue empleada como un arma de guerra, diseñada para erosionar la juventud y las instituciones estadounidenses.
«Me llamo Hugo Carvajal Barrios. Durante muchos años, fui un alto cargo del régimen venezolano. Fui un general de tres estrellas, de la confianza de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, y me desempeñé como director de inteligencia militar y diputado de la Asamblea Nacional. Hoy me encuentro en una prisión estadounidense porque me declaré culpable voluntariamente de los delitos que se me imputan: una conspiración narcoterrorista. Escribo para expiar mis pecados contando toda la verdad, para que Estados Unidos pueda protegerse de los peligros que presencié durante tantos años», comienza el exfuncionario del chavismo.
«Fui testigo personal de cómo el gobierno de Hugo Chávez se convirtió en una organización criminal que ahora está dirigida por Nicolás Maduro, Diosdado Cabello y otros altos funcionarios del régimen. El propósito de esta organización, ahora conocida como el Cártel de los Soles, es utilizar la droga como arma contra Estados Unidos. Las drogas que llegaron a sus ciudades por nuevas rutas no fueron producto de la corrupción ni obra de narcotraficantes independientes; fueron políticas deliberadas coordinadas por el régimen venezolano contra Estados Unidos», agregó Carvajal.

EL PLAN NACIÓ EN CUBA
En su carta, Hugo “El Pollo” Carvajal no solo denunció el uso del narcotráfico como arma contra Estados Unidos, sino que también reveló cómo esa estrategia se articuló con el apoyo de aliados internacionales.
Según sus declaraciones, el chavismo recibió asesoría externa para consolidar un plan de guerra irregular que trascendía las fronteras venezolanas y se apoyaba en organizaciones armadas y terroristas.
«Este plan fue sugerido por el régimen cubano a Chávez a mediados de la década de 2000 y se ha ejecutado con éxito con la ayuda de las FARC, el ELN, agentes cubanos y Hezbolá. El régimen ha proporcionado armas, pasaportes e impunidad a estas organizaciones terroristas para que operen libremente desde Venezuela contra Estados Unidos», aseveró.
TREN DE ARAGUA
Carvajal fue más allá de las denuncias sobre narcotráfico y reveló cómo el chavismo habría instrumentalizado la criminalidad organizada como parte de su estrategia de control político.
Según su testimonio, las bandas delictivas no surgieron de manera espontánea, sino que fueron reclutadas y utilizadas deliberadamente por Maduro para consolidar poder, expandir influencia y proyectar violencia dentro y fuera de Venezuela.
«Estuve presente cuando se tomaron decisiones para organizar y utilizar como arma a las bandas criminales en toda Venezuela para proteger al régimen, entre ellas el grupo conocido como el Tren de Aragua. Chávez ordenó el reclutamiento de líderes criminales dentro y fuera de las cárceles para defender la revolución a cambio de impunidad», afirmó.
«Tras la muerte de Chávez, Maduro amplió esta estrategia exportando la criminalidad y el caos al extranjero para atacar a los exiliados políticos venezolanos. Y reducir artificialmente las estadísticas de delincuencia en Venezuela. Se ordenó a los líderes de las bandas expulsar a miles de miembros del país. Esto se coordinó a través del Ministerio del Interior, el Ministerio de Prisiones, la Guardia Nacional y la policía nacional. El Tren de Aragua se convirtió en el más eficaz y de mayor crecimiento. Cuando la política de fronteras abiertas de Biden-Harris se hizo pública, aprovecharon la oportunidad para enviar a estos agentes a Estados Unidos. Ahora cuentan con personal obediente y armado en territorio estadounidense. Para financiar sus operaciones, recibieron instrucciones explícitas de seguir secuestrando, extorsionando y asesinando. Cada delito que cometen en su territorio es un acto ordenado por el régimen», continuó.
OTRAS ACUSACIONES DE CARVAJAL
Asimismo, Carvajal aseveró que en EEUU hay infiltrados espías venezolanos y Smartmatic es un sistema global de fraudes y ha tenido incidencia en EEUU.
Y sobre el primer punto señaló: «Estuve presente cuando la inteligencia rusa llegó a Caracas para proponer a Hugo Chávez la intervención de los cables submarinos de Internet. Conectan la mayor parte de América del Sur y las islas del Caribe con Estados Unidos. Tienen el fin de penetrar las comunicaciones del gobierno de Estados Unidos. En 2015, le advertí a Maduro que permitir que la inteligencia rusa construyera y operara un puesto de escucha secreto en la isla La Orchila algún día provocaría bombas estadounidenses. Me ignoró. Durante veinte años, el régimen venezolano envió espías a su país; muchos siguen allí, algunos disfrazados de miembros de la oposición venezolana. La inteligencia cubana me mostró sus redes dentro de sus bases navales en la Costa Este. Se jactaron de haber enviado miles de espías durante décadas, algunos de ellos ahora políticos de carrera».
Sobre la «manipulación de elecciones», dijo: «Smartmatic nació como una herramienta electoral del régimen venezolano. Pronto se convirtió en una herramienta paraayudar a que el régimen se mantuviera en el poder. Lo sé porque puse al jefe de informática del Consejo Nacional Electoral (CNE) en su puesto, y él reportaba directamente a mí. El sistema Smartmatic puede ser alterado; esto es un hecho. Esta tecnología se exportó posteriormente al extranjero, incluso a Estados Unidos. Los agentes del régimen mantienen relaciones con funcionarios electorales y empresas de máquinas de votación dentro de su país. No afirmo que todas las elecciones sean robadas. Pero afirmo con certeza que las elecciones pueden ser manipuladas con el software, y se ha utilizado para ello».

