Un juez federal de Los Ángeles desestimó la segunda demanda presentada por Spencer Elden, mejor conocido como el «bebé de Nirvana» ya que su imagen apareció en la portada del legendario álbum Nevermind (1991) de Nirvana, cuando apenas era un bebé, según informó Reuters.
Elden había acusado a la banda, a Universal Music Group, a la viuda de Kurt Cobain y al fotógrafo Kirk Weddle de presunta explotación sexual infantil, alegando que la foto en la que se le ve desnudo nadando hacia un billete de un dólar, constituía pornografía infantil.
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Sin embargo, el magistrado Fernando Olguin determinó que “ningún jurado razonable podría interpretar la imagen como pornografía”. En su fallo, comparó la portada con “una foto familiar de un niño desnudo bañándose”, concluyendo que la imagen no reúne las características de material sexualmente explícito.
Con esta resolución, emitida el 30 de septiembre, el tribunal descartó que el caso pudiera derivar en responsabilidad penal, cerrando definitivamente una de las disputas legales más mediáticas vinculadas a la industria musical.
¿QUÉ DICEN LOS ABOGADOS?
Por su parte, el abogado de Nirvana, Bert Deixler, celebró la decisión “estamos encantados de que el tribunal haya puesto fin a este caso sin fundamento y liberado a nuestros clientes creativos del estigma de acusaciones falsas”.
Mientras que, los representantes legales de Elden evitaron dar declaraciones tras conocerse la sentencia.
El «bebé de Nirvana», que hoy tiene 34 años, presentó la primera demanda en 2021 donde aseguró haber sufrido daños permanentes por la difusión global de su imagen, dado que Nevermind vendió millones de copias y se convirtió en un ícono cultural de los años 90.
El caso había sido desestimado en 2022 por haber sido presentado fuera de plazo, pero una apelación en 2023 obligó a revisar el fondo del asunto. La nueva sentencia, sin embargo, reafirma que la portada no vulnera las leyes estadounidenses sobre pornografía infantil.
