Dos mujeres, una madre y una abuela, enfrentan cargos por someter a un niño a un cruel abuso, obligándolo a usar un collar de descargas eléctricas para perros dentro de su hogar.
Las sospechosas, identificadas como Kimberly Cruz-Feliciano, de 30 años, y su madre, Sonia Feliciano, de 59, fueron detenidas esta semana luego de que el menor llegara a la Escuela Primaria de Cape May con marcas visibles en su cuerpo, lo que alertó a las autoridades escolares y provocó una investigación.
De acuerdo con la denuncia penal, el niño era forzado a llevar el collar de electrochoque de manera constante en la casa, siendo activado como castigo cuando molestaba a Cruz-Feliciano.
CHILD ABUSE CHARGES: Cape May Co. Prosecutor’s Office charged Kimberly Cruz-Feliciano, 30, for allegedly forcing her child to wear a dog shock collar and using it when the child made her angry.
Neighbors are surprised by what happened behind closed doors.@6abc at 11: pic.twitter.com/EOWzNRqmUa
— Briana Smith (@brianasmithnews) March 22, 2025
Tras el interrogatorio, la madre de la víctima admitió los hechos y afirmó que había pedido a su madre deshacerse del dispositivo. Sin embargo, según el testimonio de la víctima, el collar continuaba en la casa, guardado junto con objetos de una mascota fallecida.
Además, documentos judiciales revelaron que seguían cargando el dispositivo con regularidad tras la muerte del perro.
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La Fiscalía del Condado de Cape May informó que Cruz-Feliciano supuestamente amenazó al menor con más violencia si denunciaba el abuso.
Vecinos de la familia declararon a Action News que no era la primera vez que autoridades iban a la vivienda. Además, precisaron que aunque sabían de los maltratos, jamás se imaginaron lo de las descargas eléctricas.
«Es muy triste. Detesto oír algo así, de verdad. Y está aquí mismo, en el barrio, y no lo sabía», comentó un residente cercano, sorprendido por las acusaciones.
EL ARRESTO DE LA MADRE Y LA ABUELA
Cruz-Feliciano fue privada de libertad el martes y enfrenta cargos por agresión con agravantes, poner en peligro el bienestar de un menor y otros delitos.
Actualmente permanece detenida en el Centro Correccional del Condado de Cape May a la espera de su proceso judicial.
Por su parte, Sonia Feliciano, quien presuntamente presenció el abuso y habría intentado encubrirlo, fue acusada de obstrucción y manipulación de pruebas. Fue liberada mientras se desarrollan las investigaciones.
