En un operativo llevado a cabo en Raleigh, Carolina del Norte (EEUU), el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas inglés) arrestó a Ricardo Padillia-Granadillo. Se trata de un joven de 24 años, acusado de ser miembro de la peligrosa banda venezolana conocida como el Tren de Aragua.
Según informes, a Granadillo lo arrestaron el pasado 8 de febrero. Específicamente, en una residencia de la ciudad. Además de sus vínculos con el Tren de Aragua, Granadillo enfrenta cargos federales por participar en un tiroteo masivo ocurrido en Chicago.
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Granadillo ingresó ilegalmente a los EEUU el 1 de octubre de 2022, cruzando la frontera cerca de El Paso, Texas.
Tras ser interceptado por agentes de la Patrulla Fronteriza, se le otorgó un permiso temporal bajo las políticas migratorias vigentes durante la administración de Joe Biden.
Sin embargo, al no presentarse a una cita de inmigración en septiembre de 2024, se emitió una orden de arresto en su contra.
Durante el operativo en Raleigh, también se detuvo a otros 10 ciudadanos venezolanos que se encontraban en la residencia y que, según las autoridades, estaban en el país de manera irregular.
Los agentes incautaron un arma de fuego y municiones durante la redada. El Servicio de Alguaciles de Estados Unidos colaboró en la operación.
Sin embargo, las autoridades no revelaron la ubicación exacta de la redada ni si los otros detenidos enfrentan cargos adicionales.
LUCHA CONTRA TREN DE ARAGUA
El Tren de Aragua es considerada una de las bandas más peligrosas de América Latina, con raíces en las cárceles de Venezuela y una expansión que ha llegado a varios países, incluyendo Estados Unidos.
La captura de Granadillo coincide con una nueva iniciativa conjunta entre Interpol Washington y las autoridades canadienses. Todo con el fin de combatir esta organización criminal transnacional.
A Granadillo lo trasladaron inicialmente al centro de detención del condado de Wake, donde se le retuvo bajo una orden federal. Posteriormente, su caso fue transferido al sistema judicial federal en el Distrito Oeste de Texas, donde se procesarán los cargos relacionados con su ingreso ilegal al país.