Un insólito y perturbador caso de crueldad animal sacudió a la comunidad de Hudson, Florida (EEUU), donde Craig John Vogt, un hombre de 61 años, fue arrestado por matar y cocinar a dos de sus pavorreales mascota.
De acuerdo con lo reseñado por People, el motivo detrás de este acto fue el enojo que sentía hacia su vecina, quien alimentaba regularmente a los pavorreales a pesar de sus objeciones.
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La situación escaló hasta convertirse en un conflicto vecinal que terminó en la mataza de las aves, que ha generado indignación y debate sobre el trato hacia los animales domésticos.
La detención tuvo lugar el 23 de septiembre. Se registró después de que la vecina encontrara una carta en su buzón donde Vogt detallaba cómo había decapitado, desangrado y cocinado los pavorreales en una sartén, “porque ella seguía alimentándolas”.
En consecuencia, Vogt está acusado de crueldad agravada hacia los animales, causándoles dolor excesivo o la muerte, un delito grave de tercer grado según la ley de Florida.
Los registros judiciales muestran que compareció ante un juez, se le asignó un defensor público y permaneció bajo custodia hasta este lunes en el Centro de Detención de Land O’ Lakes, según los registros judiciales del condado de Pasco.
Asimismo, se detalló que la vecina solicitó y obtuvo una orden de protección contra Vogt este mismo 29 de septiembre, según consta en registros judiciales.

En tanto, la Oficina del Sheriff del Condado de Pasco describió el episodio como un “incidente aislado” y aseguró que no representa un riesgo para la seguridad pública.
Las autoridades enfatizaron que el conflicto previo entre vecinos fue lo que desencadenó el ataque a los animales. De acuerdo con el informe policial, todavía no se ha determinado cuántos pavos reales tenía Vogt en total ni si alguna otra persona podría reclamar la custodia de los ejemplares que sobrevivieron.
POSIBLE CONDENA
Craig John Vogt –quien posee antencedente penales no especificados– enfrenta cargos por crueldad agravada contra los animales, un delito de tercer grado según la legislación de Florida. Este tipo de infracción conlleva sanciones penales que pueden incluir hasta cinco años de prisión estatal y multas de hasta 5.000 dólares.
Vale recordar, que la crueldad agravada se configura cuando se causa de manera deliberada “dolor extremo o la muerte” a un animal.