Las personas que buscan mejorar su salud encuentran un complicado reto en el momento de eliminar la grasa de los brazos. Aunque muchos buscan resultados rápidos, expertos indican que puede ser sumamente difícil cumplir los objetivos.
La ciencia dejó en evidencia que dietas o rutinas de ejercicio no son el único aspecto para eliminar la grasa en los brazos. También hay que sumar factores hormonales y de estilo de vida.
Amanda Grimm, entrenadora personal, explicó a Newsweek que la distribución de grasa está condicionada por la genética, la edad y las hormonas. Por tanto, dependiendo de cada persona, puede haber distintos resultados a la misma estrategia.
Tanto en hombres como mujeres, el estrógeno genera la acumulación de grasa en brazos. Además, si hay hipotiroidismo y estrés crónico, se puede ver afectado el metabolismo, que dificulta la pérdida de grasas en todo el cuerpo.
ESTRATEGIAS
Harvard Health deja claro que los depósitos de grasa en zonas específicas, como los brazos, tienen una marcada influencia genética. Sin embargo, hay estrategias que, en líneas generales, pueden ser eficientes.
La experta Grimm recordó que no se puede controlar la zona en donde se pierde peso primero. Ante este escenario, recomienda mejorar la definición muscular y buscar la reducción de grasa total del cuerpo y con un «enfoque integral».
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«Cuando desafías tus músculos con resistencia, se producen microdesgarros en las fibras musculares. Al repararse, los músculos se fortalecen y se agrandan, contribuyendo a una apariencia más tonificada y definida», expuso.
Por tanto, Grimm sostuvo que la mejor estrategia para reducir grasa en los brazos es hacer ejercicios compuestos, como flexiones o dominadas, a la vez que se aplica un déficit calórico en la rutina diaria.