Momentos de horror fueron los que vivió una pareja de migrantes venezolanos la madrugada del pasado miércoles en Neuquén, Argentina, luego de que unas personas rociaran con combustible, para generar un incendio, el lugar donde trabajan y viven; mientras ellos estaban durmiendo.
La pareja de migrantes, quienes responden al nombre de Antonio Díaz y Araceli Aranda, alegan que todo se debe a una confusión de los supuestos agresores, los cuales tendrían rencillas con el antiguo dueño del lugar.
”Fue (el fuego) de manera intencional y muy rápida, como pudimos desde adentro lo apagamos. Puesto que es nuestra única entrada y salida”, relató Díaz en declaraciones reseñadas por el medio Es Reviral.
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Los venezolanos adquirieron a finales del año pasado el local, el cual destinaron para abrir una sandwicheria llamada El Sabrosito Neuquén. Sin embargo, tomaron la mitad del lugar para vivir sin imaginar el problema que heredaban del anterior dueño.
“La situación se genera debido a una problemática entre personas que robaron el mismo local hace dos años en el mes de agosto y el antiguo dueño en defensa de la su propiedad ejerció el derecho legítimo a la defensa de su propiedad y dejó paralítico a un joven de 15 años de edad”, precisó Díaz al respecto.
En este sentido, pidieron a las autoridades mayor protección, debido a que temen que la situación pueda volver a ocurrir.
NO ESTÁN DISPUESTOS A ABANDONAR EL LUGAR
La pareja aprovechó las redes sociales para manifestar su disposición a mantenerse en Neuquén a pesar de las adversidades.
En su cuenta de Instagram aseguraron que para nadie es un secreto lo que ocurrió en el local hace un par de años. «Hecho que profundamente lamentamos porque se le arruinó la vida a familia que apuestan al trabajo como única forma de vida», señalaron.
«Hoy estamos nosotros siendo hostigado, agredidos por una situación ajena que desconocemos y que directamente no nos tiene que afectar de ninguna manera porque no tenemos relación ni con los antiguos dueños y mucho menos con los hechos» allí ocurridos.
En este sentido, aclararon que su único propósito es trabajar. «Hemos adquirido esto con mucho sacrificio y no estamos dispuestos a ceder de ninguna manera los patrimonios alcanzados», advirtieron.
Por último, se mostraron esperanzados en poder llegar a mejores términos y poder seguir brindando un buen servicio a la comunidad desde su emprendimiento.