En los últimos días la muerte de 179 personas en un accidente de avión en Corea del Sur ha consternado al mundo entero. Tras extensas averiguaciones, todo parece apuntar a que ocurrió debido a un cumulo acciones desafortunadas que dieron como resultado el fatal desenlace.
El Boeing 737-800 de la aerolínea Jeju Air había partido en Bangkok, Tailandia y pretendía aterrizar en Corea del Sur. Seis minutos antes de aterrizar el piloto recibió una alerta de riesgo aviario por parte de la torre de control de aeropuerto, al parecer había una gran bandada de aves de gran tamaño en la trayectoria del avión.
De acuerdo con imágenes captadas en video, al parecer, dos minutos después, un motor estalló aparentemente por el impacto de una o varias aves, en ese momento el piloto emitió un “mayday”. No obstante, el primer misterio del caso se centra en el falló en los demás sistemas que presentó el avión.
«Corea del Sur», porque se estrelló un avión Boeing 737-800 con 181 personas a bordo en el Aeropuerto de Muan, República de Corea 🇰🇷.
Según versiones iniciales, intentó aterrizar sin tren de aterrizaje y al final chocó contra un muro, dejando hasta ahora 28 muertos.
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Según expertos, el estallido de un motor no afecta los flaps o el tren de aterrizaje, así como le sucedió al Boeing 737-800. Los pilotos están preparados para aterrizar con un solo motor, pero el fallo hasta ahora incomprensible en el sistema de flaps y en el tren de aterrizaje agravarían aún más la situación.
Autoridades de Corea del Sur podrían tomarse meses o incluso años para develar este misterio.
El capitán del vuelo, de 45 años, acumulaba 6823 horas de vuelo. Su copiloto, de 35, sumaba 1650. Mientras tanto, la aeronave tenía 15 años de antigüedad
MURO AL FINAL DE LA PISTA
Más allá de la falla del motor, en los flaps y el tren de aterrizaje, expertos han advertido que el principal causante de la muerte fue un muro de concreto que esta en construcción al final de la pista. Al parecer la obra formaba parte de una ampliación de la terminal aérea. Por esta razón los pilotos solo tendrían cerca de 2500 metros para aterrizar. En un principio esto no era inconveniente para un avión que en condiciones normales puede detenerse en 1500 metros.
David Learmont, experto en aviación consultado por Sky News aseguró que sin el muro contra el que se estrelló el vuelo de Jeju Air “todos estarían vivos ahora”. En este sentido, dijo que los aeropuertos no deberían tener un muro de este tipo al final de la pista.
“Cuando se salió del final de la pista, no estaba en llamas. El avión estaba completamente bajo control. En el aterrizaje real, el avión estaba perfectamente al nivel de las alas. Se había manejado muy, muy bien” y “estuvo bien hasta el momento en que chocó contra la pared. Si no hubiera habido la pared, ahora todos estarían vivos”, precisó.
#ULTIMAHORA 🚨
Video de una ave pasando por la turbina, la posible causa de que se estrellara el avión en Corea del Sur
Boeing 737-800 de Jeju Air, salió de Bangkok, aterrizaba en el aeropuerto de Muan
Se nota que en pista no tenía el tren de aterrizaje.
Se estrella en muro. pic.twitter.com/q6hsnUETPO
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DOS SOBREVIVIENTES
El jefe de bomberos de Muan, Lee Jung-hyun, explicó que la cola del avión fue el único segmento que permaneció reconocible tras el accidente. “Solo la sección trasera conservó algo de su forma. El resto del fuselaje quedó completamente destruido”, afirmó. Este detalle fue clave para que los dos tripulantes, identificados como Lee Mo, de 33 años, y una mujer de 25 años de apellido Koo, fueran encontrados con vida entre los restos de la aeronave.
Lee Mo, un asistente de vuelo que estaba a cargo del servicio en la parte trasera, sufrió fracturas en el hombro izquierdo y lesiones en la cabeza. Fue trasladado inicialmente a un hospital en Mokpo, y luego llevado al Hospital de la Universidad Femenina Ewha en Seúl, donde permanece bajo observación intensiva debido a posibles secuelas graves, como el riesgo de parálisis total.
Por otro lado, Koo, también miembro de la tripulación, fue rescatada con heridas menos graves, como cortes en el cuero cabelludo y fracturas en los tobillos. Actualmente recibe atención médica en el Centro Médico Asan, en Seúl.
Según los expertos, la ubicación de ambos sobrevivientes en la parte trasera del avión fue determinante para su salvación. La cola, al ser la última en recibir el impacto directo, ofreció cierta protección frente al choque contra el muro de concreto y las llamas que destruyeron el resto de la aeronave.