Claudio Grossman, abogado de renombre internacional y experto en derechos humanos, renunció a su posición como asesor especial del fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan por el «retraso injustificable» con respecto a la investigación por crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
Grossman describió la investigación como un «fracaso injustificado» para tomar acciones contundentes contra el gobierno de Nicolás Maduro por crímenes de lesa humanidad, según informó la agencia AP y reseñado por Infobae.
El abogado de origen chileno y con una destacada trayectoria como exdecano de la American University en Washington y expresidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, había asumido el rol en la CPI en 2021. Su labor, aunque no remunerada, se centró en asesorar sobre la crítica situación de derechos humanos en Venezuela.
EL CORREO AL FISCAL DE LA CPI
En un correo electrónico enviado a Khan el mes pasado, Grossman expresó que su decisión de renunciar era una cuestión ética. “Ya no puedo justificar la elección de no tomar las medidas serias correspondientes contra los autores de las graves violaciones”, afirmó, al tiempo que rechazó una oferta de renovación de su contrato.
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A pesar de que la CPI abrió una investigación hace tres años sobre las fuerzas de seguridad venezolanas por tortura, asesinatos y detenciones arbitrarias, no se han presentado cargos formales contra funcionarios.
In a harsh email quitting as special adviser, Grossman told the @IntlCrimCourt top prosecutor that he can no longer stay silent as Maduro’s govt continues to commit abuses—without action from the ICC, which has been investigating Venezuela for 3 years. https://t.co/QXpAS5IMHh
— Joshua Goodman (@APjoshgoodman) December 13, 2024
La falta de avances en el caso contrasta con las acciones de la CPI en otras partes del mundo, como los casos contra el presidente ruso, Vladímir Putin, y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, lo que ha llevado a la oposición venezolana a acusar a la institución de aplicar un doble estándar. Líderes como María Corina Machado y Edmundo González han pedido mayor celeridad y señalando que “lo que está en juego es la vida y el bienestar de los venezolanos”.
Asimismo, sectores en Venezuela han acusado a Khan de tener un posible conflicto de intereses debido a la relación familiar con Venkateswari Alagendra, su cuñada, quien ha representado al gobierno de Maduro en audiencias ante la CPI. Aunque Khan ha negado cualquier influencia indebida, los críticos señalan que esta relación podría estar ralentizando las investigaciones.
El código de conducta de la CPI exige a los fiscales evitar cualquier situación que pueda generar dudas sobre su imparcialidad. Sin embargo, Khan argumentó recientemente que una cuñada no constituye un vínculo personal lo suficientemente cercano como para justificar su recusación.