Aliángel Rodríguez es un adolescente de 15 años que padece de esquizofrenia y se encuentra detenido en una sede de la Policía Municipal de Valencia desde el 29 de julio, un día después de las elecciones y la misma jornada en la que estallaron las protestas contra los resultados del CNE.
María Alejandra, madre del joven, ha hablado de los vejámenes por los que ha pasado en su reclusión. Incluso, narró que ha convulsionado en prisión y ha tratado de suicidarse, ya que no soporta más estar en tales condiciones.
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En entrevista con El Carabobeño, la mujer relata que su hijo no estaba protestando. Simplemente, dice, salió a ver unos fuegos artificiales y unos funcionarios policiales lo aprehendieron.
María Alejandra cuenta que pudo dar con él al tercer día de su aprehensión. Cuando lo encontró, estaba con una pierna fracturada, las costillas moradas y su cara era irreconocible, producto de las torturas.
«Los policías le dieron una golpiza salvaje y brutal a mi hijo y le decían cosas muy feas», dijo la madre. A pesar de ello, cuenta, el joven con esquizofrenia se negó a grabar un video admitiendo su culpa en algo.
#Venezuela | Aliángel Rodríguez es un adolescente de 15 años que padece de esquizofrenia y se encuentra detenido en una sede de la Policía Municipal de Valencia desde el 29 de julio.
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— Caraota Digital (@CaraotaDigital) November 23, 2024
ALIÁNGEL NO ENTIENDE QUÉ PASA
La progenitora cuenta que Aliángel es ignorante ante la situación que atraviesa. Le ha preguntado a su madre qué es un fascista o un terrorista. «Nunca ha estado interesado en la política».
La falta de entendimiento del muchacho, la impotencia y desesperanza, han incidido en su salud. El menor de edad ha convulsionado varias veces y ha pasado por crisis a raíz de su esquizofrenia. Incluso, cuenta su madre, se ha intentado quitar la vida en un par de ocasiones.
María Alejandra siente temor de que intente atentar contra su vida nuevamente. Y es que tras las recientes excarcelaciones, sobre todo de un adolescente que compartía prisión con él, se ha sentido muy deprimido. Sin recibir sus medicamentos y con el pánico que le siembra el estar encerrado, su condición se ha deteriorado.
La madre suplica a Nicolás Maduro que cumpla su palabra de liberar a los presos políticos, por lo que le pide tomar en cuenta a los niños. «Ellos están a punto de perder su vida, porque no quieren seguir viviendo, porque están desesperados por estar en un lugar en el que no deberían estar».
«Mi hijo no es terrorista. Yo soy una madre como usted dice, que soy pueblo. Señor presidente yo soy pueblo y mi hijo es un niño que tiene una condición especial, que no tiene por qué estar allí. Busque pruebas de quienes de verdad hicieron daño, pero a los que son inocentes déjelos ir con sus familiares», imploró.
