El Senado de EEUU aprobó un proyecto de ley de financiamiento de defensa por un monto récord de 895.000 millones de dólares.
Esta Ley de Autorización de la Defensa Nacional (NDAA, por sus siglas en inglés) fue respaldada en el Senado por 67 de los 100 legisladores, superando con creces la mayoría simple necesaria para su aprobación.
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El proyecto de ley incluye la compra de buques, aviones y armas, y está diseñado para mejorar la competitividad de Estados Unidos frente a rivales geopolíticos como China y Rusia.
Además de los gastos en armamento, la NDAA también se centra en mejorar la calidad de vida de los militares estadounidenses.
La ley autoriza un aumento salarial del 14,5 % para las tropas de menor rango y del 4,5 % para el resto de las fuerzas.
También destina miles de millones de dólares para viviendas militares, escuelas y guarderías, subrayando el compromiso del gobierno con el bienestar de sus fuerzas armadas.
Sin embargo, la aprobación del proyecto de ley no estuvo exenta de controversia. Una disposición que prohíbe, que el programa de salud militar TRICARE, cubra ciertos cuidados de afirmación de género para los hijos transexuales de los miembros del servicio generó oposición entre algunos demócratas.
Esta disposición fue uno de los puntos más debatidos durante las deliberaciones, reflejando las divisiones políticas en torno a temas de derechos de género y atención médica.
La aprobación de este financiamiento multimillonario subraya la importancia que Estados Unidos otorga a su defensa nacional en un contexto global cada vez más complejo.
