El gobierno de EEUU lanzó una advertencia de viaje para Fiyi debido a un brote de dengue que ha afectado a más de mil personas entre enero y marzo de este año.
De acuerdo con las autoridades estadounidenses y de ese país, la enfermedad, transmitida por el mosquito Aedes aegypti, ha generado preocupación entre los organismos sanitarios, quienes han reforzado las medidas de prevención en la región.
LEA TAMBIÉN: EL ALCALDE DE EEUU QUE TERMINÓ PRESO POR OPONERSE A QUE ABRIERAN UN CENTRO DE DETENCIÓN DE MIGRANTES
El Ministerio de Salud Pública de Fiyi confirmó que la División Central, que incluye ciudades como Suva, Navua y Rewa, es la más afectada.
Las condiciones climáticas recientes, caracterizadas por lluvias intensas y acumulación de agua, han favorecido la proliferación del mosquito transmisor. Como respuesta, el gobierno ha desplegado brigadas sanitarias para eliminar criaderos y realizar fumigaciones focalizadas.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos han emitido una advertencia de Nivel 1, instando a los viajeros a tomar precauciones, aunque sin imponer restricciones de ingreso.
Entre las recomendaciones se incluyen el uso de repelente con DEET, ropa que cubra el cuerpo y alojamiento en habitaciones con aire acondicionado o mosquiteros.
El dengue puede causar síntomas como fiebre alta, dolor muscular y malestar general, y en casos graves puede evolucionar a una forma hemorrágica que requiere atención médica inmediata.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido que el dengue representa un riesgo creciente para la salud pública mundial, afectando a aproximadamente 4.000 millones de personas en zonas endémicas.
Ante esta situación, las autoridades de Fiyi han intensificado las campañas de concienciación para reducir la propagación del virus.
Se recomienda a los residentes y turistas eliminar cualquier recipiente que pueda acumular agua y estar atentos a los síntomas de la enfermedad. Aunque el brote ha generado alarma, las medidas de prevención y control buscan minimizar su impacto en la población y en la industria turística del país.
