En las últimas horas han salido a la luz nuevos detalles que revelan la participación de funcionarios estadounidenses en la planificación de la operación de extracción de María Corina Machado de Venezuela.
La premio Nobel de la Paz y líder de la oposición en Venezuela tuvo que salir del país con una peluca y un disfraz, pero la operación necesitó mucha más logística que eso. Funcionarios estadounidenses confirmaron que la operación se planificó cuidadosamente para evitar cualquier filtración que pudiera poner en peligro a la principal opositora del gobierno de Nicolás Maduro.
El escape de Machado de Venezuela comenzó el lunes por la tarde, según informó The Wall Street Journal. Disfrazada y con una peluca se trasladó desde Caracas, donde llevaba un año escondida, hasta un pueblo pesquero costero, donde la esperaba una lancha.
Una persona cercana a la operación reveló a dicho medio que durante las 10 horas del trayecto por tierra pasaron por 10 puestos de control militares, los cuales pudieron sortear sin mayores contratiempos.
Una vez en la lancha pesquera se dirigió a Curazao, a unos 65 kilómetros de la costa venezolana en medio de un mar picado y fuertes vientos. «Coordinamos que ella iba a salir por una zona específica para que no volaran la embarcación», dijo una persona cercana al operativo.
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Mientras esto ocurría dos aviones F18 de la Armada de EEUU se cruzaron en la ruta de la embarcación en el Golfo de Venezuela y pasaron aproximadamente 40 minutos volando en círculos cerrados cerca de la ruta que la llevaría desde la costa hasta Curazao. Desde allí, abordó un avión privado Legacy 600, matriculado en México y operado por JetVip Business Aviation, con capacidad para 13 pasajeros.
La aeronave que había arribado a Curazao procedente de Miami recogió a Machado y volaron hasta Maine, Estados Unidos, donde realizaron una escala técnica de cinco horas. Finalmente, tomó un vuelo de más de seis horas hasta el aeropuerto de Oslo Gardermoen, completando un trayecto de casi 9.000 kilómetros.
María Corina llegó a la capital de noruega en la madrugada del jueves.
Durante su discurso la líder opositora expresó su agradecimiento a quienes arriesgaron su seguridad para hacer posible su llegada, según relató en una conversación telefónica con Jørgen Watne Frydnes, presidente del Comité Noruego del Nobel. «Bueno, en persona, les contaré lo que tuvimos que pasar, y tanta gente que arriesgó su vida para que yo pudiera llegar a Oslo. Y les estoy muy agradecida y esto es una muestra de lo que significa este reconocimiento para el pueblo venezolano».

