En un trágico incidente ocurrido en Wakefield, New Hampshire (EEUU), una familia de cuatro miembros fue encontrada muerta en su hogar el día de Navidad debido a una aparente intoxicación por monóxido de carbono.
Todas las víctimas son mayores de 18 años. El hallazgo se registró después de que familiares preocupados llamaran a la policía para solicitar un chequeo de bienestar, ya que no se habían presentado a una reunión navideña como se esperaba.
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Las autoridades informaron que no se encontraron detectores de monóxido de carbono en la vivienda, lo que pudo haber contribuido a la tragedia.
El jefe de bomberos del estado, Sean Toomey, enfatizó la importancia de tener alarmas de monóxido de carbono. Y enfatizó en que se debe priorizar su buen funcionamiento en los hogares para prevenir este tipo de incidentes.
“Es un evento terriblemente trágico. Este año ha sido difícil en cuanto a muertes por monóxido de carbono y por incendios en nuestro estado”, expresó Toomey durante una conferencia de prensa.
Este gas inodoro y mortal puede acumularse rápidamente en espacios cerrados y causar envenenamiento en cuestión de minutos.
Las autoridades están realizando una revisión exhaustiva de la vivienda para determinar las causas exactas del incidente y evitar futuros accidentes.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), cada año más de 400 personas mueren en Estados Unidos por intoxicación con este gas. También se apuntó que más de 100.000 acuden a salas de emergencias por exposición.
