Un hombre identificado como Miguel Quino, de 55 años, y presuntamente bajo efectos de drogas, irrumpió armado con un machete en la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe en Veracruz, México y prendió en fuego el altar.
En un video divulgado en redes sociales se puede ver como el hombre causó destrozos dentro del templo e incendió el altar principal, mientras aseguraba que “el diablo le ordenó” hacerlo.
Dos personas que trabajaban en la iglesia resultaron heridas al intentar frenar los daños y tres mujeres sufrieron crisis nerviosas. La policía municipal logró detener al agresor sin complicaciones y lo puso a disposición de las autoridades para su investigación. Las causas están bajo indagatoria, con el consumo de drogas como principal hipótesis.
🔴 «El diablo me lo ordenó» 🗣️ Un sujeto entró a la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe en Tilapan, Veracruz y le prendió fuego al altar principal
Al ser cuestionado, aseguró que el «diablo se lo había ordenado» 😳 pic.twitter.com/LXyufT1sFO
— adn40 (@adn40) August 25, 2025
IGLESIA TENDRÁ QUE HACER MISA DE REPARACIÓN
La autoridad religiosa retiró todos los adornos del altar y mantuvo la iglesia cerrada hasta la celebración de reparación dirigida por el obispo. El padre Teódulo Morales Meza, vocero de la Diócesis de San Andrés Tuxtla, informó que la misa es para “restaurar la santidad del lugar y reafirmar la devoción de la comunidad”.
El sacerdote invitó a la participación de “toda la comunidad parroquial de Tilapan, quienes se unieron en oración y recogimiento. Como un símbolo significativo de purificación y renovación, la misa inició fuera del templo, ya que la parroquia permaneció cerrada” desde el incidente hasta antes de la Eucaristía.
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“Este acto enfatizó la importancia de la reparación y la nueva consagración del altar como centro de la vida espiritual de la parroquia”, agregó.
«La misa de reparación y consagración es un rito litúrgico especial que busca expiar cualquier profanación o sacrilegio cometido contra un lugar sagrado. A través de oraciones, bendiciones y la unción del altar con óleos sagrados, se busca restaurar la dignidad del espacio y reafirmar su propósito como lugar de encuentro con Dios», explicó.
En esa línea, el canon 1211 del Código de Derecho Canónico establece que “los lugares sagrados son violados por acciones gravemente injuriosas realizadas en ellos con escándalo para los fieles” y que, cuando esto sucede, “no es lícito ejercer el culto en ellos hasta que se repare el daño con un rito penitencial según la norma de los libros litúrgicos”.
