Una de las grandes dificultades de la cocina casera es cómo preparar de forma adecuada un huevo hervido. Muchos se han llevado una gran decepción cuando se sientan a comer y descubren que la yema está seca o grumosa.
La ciencia explica en dónde radica la dificultad en preparar un huevo hervido: es complicado definir la temperatura ideal. La yema requiere que el agua esté a 65 °C para su cocción, mientras que la clara necesita de 85 °C.
Muchas personas buscan hervir el huevo a 100 °C, lo cual permite que la clara esté tierna rápidamente. Sin embargo, la yema quedará firme, algo que no puede ser satisfactorio para quienes les gusta que quede cremosa y suave.
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Al entender esto, queda claro que los métodos convencionales dificultan que el huevo hervido quede con la misma textura en su totalidad. Ante este escenario, especialistas descubrieron el método perfecto para prepararlo.
ASÍ SE HACE UN HUEVO HERVIDO
Una de las principales opciones es preparar el huevo hervido con el método sous vide. Este consiste en prepararlo en agua a temperatura entre 60 y 70 °C por una hora, que permitirá que la yema esté líquida y la clara quede viscosa.
No obstante, esta opción puede tomar mucho tiempo. Por tanto, Pellegrino Musto, un científico del Consejo Nacional de Investigación en Pozzuoli, reveló un nuevo método llamado cocción periódica.
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Esta estrategia establece que se debe cocinar el huevo en agua hirviendo a 100 °C y luego pasarlo a un tazón de agua tibia a 30 °C. Se debe cambiar entre ambos cada dos minutos por un periodo total de 32 minutos.
Los especialistas reconocen que esta no es la mejor estrategia para los cocineros caseros. No obstante, aseguran que merece el esfuerzo, puesto que la recompensa será grande y tendrás el mejor huevo hervido de tu vida.