En un trágico incidente ocurrido en Louisville, Kentucky (EEUU), un hombre fue sentenciado recientemente a 20 años de prisión después de matar a su hijo de un mes en un ataque de ira provocado por la frustración de perder en un videojuego.
Anthony Trice, de 32 años, se declaró culpable de homicidio, según informes del Louisville Courier Journal y WDRB.
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El incidente tuvo lugar en mayo de 2019, cuando Trice estaba solo en casa cuidando a su hijo. Al perder repetidamente en un videojuego, Trice arrojó el control y golpeó al bebé en la cabeza con su puño.
En un intento de calmar al niño, lo levantó, pero lo dejó caer mientras se dirigía a la cocina para preparar un biberón.
Trice luego colocó al bebé en una posición sentada y se alejó para usar el baño. Al regresar, encontró al niño en estado de angustia y llamó al 911.
El bebé fue trasladado de urgencia al hospital, donde falleció al día siguiente debido a las heridas sufridas. Inicialmente, Trice fue arrestado por abuso infantil en primer grado, pero los cargos se elevaron a homicidio tras la muerte del niño.
Trice finalmente se declaró culpable de homicidio en un acuerdo de culpabilidad conocido como Alford plea, en el que no admite su culpabilidad, pero reconoce que hay suficiente evidencia para condenarlo.
La familia del bebé quedó devastada por el incidente. La tía del niño, en una entrevista con WLKY, expresó su incredulidad y dolor por la tragedia.
La abuela materna del bebé también manifestó su enojo y tristeza, afirmando que nunca hubiera imaginado que algo así pudiera suceder en su familia.