En un giro inesperado, lo que comenzó como una broma entre cuñados terminó en un litigio legal en EEUU. Un hombre decidió llevar a juicio a su pariente después de que este le sellara el ombligo con pegamento mientras dormía.
De acuerdo con medios locales, la víctima, al intentar retirar el pegamento, sufrió lesiones que requirieron atención médica, lo que lo llevó a tomar acciones legales para cubrir los gastos médicos.
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En concreto, la broma le costó más de 2.000 dólares en gastos médicos a la víctima.
Lo que se relató, es que el hombre se había quedado dormido en una hamaca sin camisa tras consumir alcohol. Su cuñado, en un acto que consideró gracioso, le vertió pegamento instantáneo en el ombligo mientras dormía.
Cuando el hombre despertó, descubrió que el pegamento se había secado, adhiriéndose tanto a su ombligo como a uno de sus dedos.
Al intentar removerlo, sufrió desgarros en la piel que lo obligaron a buscar asistencia médica. En la sala de emergencias, los médicos utilizaron un solvente especial y una pomada para retirar la sustancia, pero el procedimiento no fue económico.
Aproximadamente, la factura médica ascendió a 2.253 dólares, de los cuales el afectado tuvo que pagar un copago de 1.000 dólares debido a su seguro médico
El conflicto empeoró cuando el responsable de la broma se negó a pagar, lo que llevó al afectado a presentar una demanda en un tribunal de pequeñas causas.
El juez falló a favor del demandante y ordenó que el cuñado le reembolsara el dinero. Pese al mandato de la justicia, hasta el momento el acusado no ha cumplido con la sentencia.
